La Asociación Cultural de Sumilleres de La Rioja celebró la semana pasada un evento inaugural de su programa de formación 2021 al que denominaron 'Vinubiquo' de Primavera 2021, una jornada para recuperar la ilusión ante los duros momentos para el sector por la pandemia: «Ha sido una celebración muy especial de lo que se espera que sea, con la llegada de la primavera 2021, el principio del fin de la crisis del COVID-19», explica su presidente, José Félix Paniego. «Queríamos mostrar el dinamismo de la asociación, que ha continuado programando actividades formativas adaptadas a las circunstancias como el mejor remedio para salir juntos de la crisis; con este evento hemos recibido la primavera y lo que confiamos que sea la vuelta al trabajo para la hostelería y otros sectores».

Los sumilleres riojanos –distribuidos en grupos de seis personas– hablaron de vino, paisaje y de esperanza en siete de las bodegas colaboradoras de la Asociación: Altanza (Fuenmayor), Dominio de Queirón (Quel), López de Heredia Viña Tondonia (Haro), Oscar Tobía (Cuzcurrita), Torre de Oña (Páganos), Valenciso (Ollauri) y Vivanco (Briones).

El nombre 'Vinubiquo' hace referencia a la presencia simultánea de los sumilleres en todo el territorio de la Denominación de Origen el mismo día y a las mismas horas, con los bodegueros como anfitriones y descorchando lo mejor de cada bodega, contando proyectos y abrazando ese optimismo tan necesario: «Nos hemos inventado una palabra solo para disfrutar de su significado, inventamos razones para compartir juntos una experiencia única, como la que se ha dejado sentir por toda la geografía vitivinícola riojana, pero, sobre todo, para darnos cuenta de lo importante que es creer en lo que somos y en lo que tenemos», explica Paniego.